Esperanza de vida y Sintrom: ¡Descubre la verdad sobre este anticoagulante!
Si estás tomando Sintrom como parte de tu tratamiento anticoagulante por fibrilación auricular o algún problema cardíaco, seguro que te has preguntado qué impacto tiene en tu vida a largo plazo.
¿Me ayudará a vivir más? ¿Me pondrá en riesgo? vamos a aclarar todo lo que necesitas saber sobre el Sintrom y su relación real con la longevidad, sin tecnicismos ni miedo, solo información clara para que tomes decisiones con tranquilidad y confianza.
¿Qué es el Sintrom y cómo funciona?
Hablar del Sintrom puede generar algo de inquietud, sobre todo si te lo han recetado por primera vez. Lo cierto es que se trata de un medicamento anticoagulante, es decir, un tratamiento que «afina» la sangre para evitar que se formen coágulos peligrosos que podrían acabar en un ictus, una embolia o una trombosis.
Este fármaco contiene acenocumarol, una sustancia que bloquea la acción de la vitamina K, que el cuerpo necesita para formar los coágulos. Es lo que en medicina se llama un antagonista de la vitamina K (AVK).
Su efecto es sencillo de entender: hace que la sangre tarde más en coagularse, y eso es justo lo que necesitamos cuando el corazón —como en el caso de quienes tienen fibrilación auricular— bombea de forma irregular y puede favorecer la aparición de trombos.
En España, hay más de 700.000 personas que toman Sintrom cada día. La mayoría de quienes los usan superan los 65 años y suelen estar bajo varios tratamientos. En ellos, el Sintrom ayuda a prevenir complicaciones serias y a mantener el corazón protegido.
El control del tratamiento es fundamental. Por eso, quienes lo toman deben hacerse análisis periódicos para medir el INR, que es una prueba que nos dice cuánto tiempo tarda la sangre en coagularse. El valor ideal suele estar entre 2.0 y 3.0, aunque puede variar según cada caso.
Si el INR está muy bajo, hay riesgo de trombos; si está muy alto, aumenta la probabilidad de hemorragias.

Tipos de anticoagulantes
Existen distintos tipos de anticoagulantes, todos tienen una función dentro de la salud y todos tienen que ver con la sangre, así que aquí te los enseñamos:
- AVK (Sintrom y warfarina): Anticoagulantes clásicos que bloquean la vitamina K. Requieren controles frecuentes del INR y tienen muchas interacciones.
- ACOD o DOAC: Son anticoagulantes orales modernos como apixabán o dabigatrán.
- Heparinas: Se administran por inyección. Muy usadas en hospitales para prevenir trombos tras cirugías o inmovilización.
- Inhibidores de la trombina: Como el dabigatrán. Bloquean directamente una enzima clave para formar coágulos.
- Inhibidores del factor Xa: Fármacos como rivaroxabán. Actúan bloqueando la coagulación en sus primeras fases y suelen tener buena tolerancia.
¿El Sintrom afecta a la esperanza de vida?
No, el sintrom no afecta a la esperanza de vida, de hecho la alarga, ya que si tienes una afección que perjudica a la sangre o el corazón y te lo indica el médico, te ayudará mucho, un buen tratamiento de anticoagulación salva vidas.
La siguiente gráfica muestra estimaciones del número de personas que utilizan AVK como el sintrom en cinco países clave, basadas en datos del registro PREFER in AF (2012–2013).
FUENTE: https://pubmed.ncbi.nlm.nih.gov/24651882/
Alternativas a este anticoagulante
Aunque el antigoagulante mencionado es uno de los más usados en España, no es la única opción para los pacientes anticoagulados, especialmente para aquellos con problemas cardíacos, valvulares o pulmonares. En particular, los pacientes con fibrilación auricular o que tienen prótesis cardíacas pueden beneficiarse de otros tratamientos que se ajustan mejor a su situación clínica.
La Sociedad Española de Cardiología recomienda evaluar cada caso individualmente para determinar cuál es el anticoagulante más adecuado, siempre manteniendo el INR dentro del rango terapéutico para evitar riesgos tanto de hemorragia como de formación de coágulos.
Entre las alternativas al Sintrom destacan los anticoagulantes orales directos (ACOD), que incluyen fármacos como el apixabán o el dabigatrán. Estos medicamentos tienen la ventaja de no requerir controles tan estrictos de coagulación y presentan menos interacciones con otros fármacos, lo que puede facilitar el manejo en pacientes polimedicados o con enfermedades pulmonares asociadas.
Sin embargo, no todos los pacientes cardíacos pueden usar ACOD; por ejemplo, quienes tienen válvulas mecánicas o prótesis cardíacas suelen necesitar anticoagulación con AVK, ya que la evidencia actual respalda mejor su eficacia en estos casos.
En definitiva, el tratamiento anticoagulante debe adaptarse a cada perfil, siempre bajo la supervisión médica y siguiendo las pautas oficiales, para asegurar una protección eficaz sin comprometer la calidad de vida.
Consejos para pacientes bajo tratamiento
El tratamiento con Sintrom requiere de atención y cuidado para asegurar que funcione correctamente y evitar complicaciones. Si eres paciente bajo anticoagulación, estos consejos te ayudarán a mantener un control óptimo.
Mantén tus controles periódicos al día
Uno de los pilares fundamentales del tratamiento es realizar controles periódicos para medir el INR, también conocido como TAO (Terapia Anticoagulante Oral).
Esto permite ajustar la dosis de Sintrom y mantener el rango adecuado, evitando tanto el riesgo de trombosis venosa como el de hemorragias. No faltes a tus citas médicas ni a las analíticas; son clave para tu seguridad.
¡Hacer Test de Longevidad!Informa sobre cualquier prótesis valvular
Si tienes una prótesis valvular, es especialmente importante que lo comuniques a tu equipo médico. Este dato es crucial para definir la estrategia anticoagulante más segura y efectiva para ti, ya que el manejo puede ser diferente al de otros pacientes sin prótesis. Un seguimiento específico es necesario para prevenir complicaciones.
Cuida tu salud venosa
El riesgo de trombosis venosa es algo a considerar durante el tratamiento anticoagulante. Aunque el Sintrom ayuda a prevenir coágulos, también es fundamental que cuides tu circulación venosa: evita estar mucho tiempo sentado o inmóvil, haz ejercicio moderado y consulta cualquier dolor o hinchazón en las piernas.
Conoce los posibles efectos secundarios
El riesgo de trombosis venosa es algo a considerar durante el tratamiento anticoagulante. Aunque el Sintrom ayuda a prevenir coágulos, también es fundamental que cuides tu circulación venosa: evita estar mucho tiempo sentado o inmóvil, haz ejercicio moderado y consulta cualquier dolor o hinchazón en las piernas.
Entérate de las últimas novedades
Manuel de la Peña, M.D., Ph.D.
Director de la Cátedra del Corazón y Longevidad, Doctor “cum laude” en medicina, profesor de cardiología, escritor, académico, investigador y con experiencias de éxito en gestión.
